oca_008
24th April 2007, 16:08
El comportamiento de Luis Fernández y de algunos de sus ayudantes en el Espanyol-Betis dejó mucho que desear. Al igual que sucedió en la Copa del Rey con Juande Ramos, el técnico galo se dedicó a insultar y a provocar a los jugadores blanquiazules y, en especial, a su técnico, Ernesto Valverde. Incluso, muchos testimonios aseguran que le acusó de dejarse ganar en el duelo ante el Athletic en San Mamés. Evidentemente, la cosa acabó en tangana en el tunel de vestuarios al acabar el partido.
Luis Fernández estuvo, desde el primer minuto, tirando ‘bombas’ hacia el banquillo blanquiazul. Y el galo tenía una obsesión clara: “En Bilbao jugaste sin titulares, les regalasteis el partido y ahora no reservas a casi ninguno. Esto sí que es una vergüenza”. Lo repitió en más de una ocasión faltando, incluso, el respeto a los jugadores que estuvieron encima del césped de San Mamés.
En el descanso siguieron las insinuaciones y las provocaciones. Luis Fernández salió tras Valverde y, comentando la reciente expulsión de Walter Pandiani, le dijo: “Jo, el Rifle, como va por ahí pegando. Jo, jo, jo, pero si no ha hecho nada y le han echado”. Los dos técnicos ni se miraron.
La segunda mitad comenzó con la misma tensión que en la primera parte, pero las cosas se calmaron cuando el Betis metió el 1-2. Luis Fernández cambió su actitud, se dedicó a aleccionar a sus jugadores y dio una tregua al banquillo españolista.
Pero lo peor estaba por llegar. El inexistente penalty de Contreras a Tamudo encendió el fuego entre los banquillos y se produjo una situación lamentable. El preparador físico del conjunto verdiblanco, Feliciano Di Blasi, que también estuvo en el Espanyol con Luis Fernández le pidió a Raúl Tamudo que fallara el penalty. El capitán blanquiazul se lo quitó de encima y chutó a marcar. Al acabar el encuentro, Di Blasi, de forma increíble le recriminó la acción y la discusión subió de tono, aunque no pasó nada.
Ahí no pasó nada, pero Luis Fernández continuaba con su obsesión personal y fue a por Valverde. Entre la zona de banquillos y la puerta de vestuarios le soltó todo tipo de improperios insinuando de forma bastante clara que el Espanyol se dejó ganar en San Mamés o, como mínimo, que había facilitado las cosas. Valverde, un hombre tranquilo al que le cuesta salirse de sus casillas, no pudo aguantar más y se fue a por Luis, aunque, por fortuna, la cosa no fue a más.
Al árbitro, Pérez Lima, le dijeron absolutamente de todo y sólo reflejó en el acta unos pocos insultos. Incluso, el utillero del Betis le volvió a insultar a la cara cuando el acta ya estaba redactada, pero responsables del Espanyol le invitaron a irse para evitar males mayores. Sin duda, la imagen que dejaron en Montjuïc deja mucho que desear.
http://www.sport.es/default.asp?idpublicacio_PK=44&idioma=CAS&idnoticia_PK=399368&idseccio_PK=804&h=
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Luego se quejó del comportamiento de Valverde al festejar el gol del empate. No te jode, todo el partido dando por culo, pues normal...
Luis Fernández estuvo, desde el primer minuto, tirando ‘bombas’ hacia el banquillo blanquiazul. Y el galo tenía una obsesión clara: “En Bilbao jugaste sin titulares, les regalasteis el partido y ahora no reservas a casi ninguno. Esto sí que es una vergüenza”. Lo repitió en más de una ocasión faltando, incluso, el respeto a los jugadores que estuvieron encima del césped de San Mamés.
En el descanso siguieron las insinuaciones y las provocaciones. Luis Fernández salió tras Valverde y, comentando la reciente expulsión de Walter Pandiani, le dijo: “Jo, el Rifle, como va por ahí pegando. Jo, jo, jo, pero si no ha hecho nada y le han echado”. Los dos técnicos ni se miraron.
La segunda mitad comenzó con la misma tensión que en la primera parte, pero las cosas se calmaron cuando el Betis metió el 1-2. Luis Fernández cambió su actitud, se dedicó a aleccionar a sus jugadores y dio una tregua al banquillo españolista.
Pero lo peor estaba por llegar. El inexistente penalty de Contreras a Tamudo encendió el fuego entre los banquillos y se produjo una situación lamentable. El preparador físico del conjunto verdiblanco, Feliciano Di Blasi, que también estuvo en el Espanyol con Luis Fernández le pidió a Raúl Tamudo que fallara el penalty. El capitán blanquiazul se lo quitó de encima y chutó a marcar. Al acabar el encuentro, Di Blasi, de forma increíble le recriminó la acción y la discusión subió de tono, aunque no pasó nada.
Ahí no pasó nada, pero Luis Fernández continuaba con su obsesión personal y fue a por Valverde. Entre la zona de banquillos y la puerta de vestuarios le soltó todo tipo de improperios insinuando de forma bastante clara que el Espanyol se dejó ganar en San Mamés o, como mínimo, que había facilitado las cosas. Valverde, un hombre tranquilo al que le cuesta salirse de sus casillas, no pudo aguantar más y se fue a por Luis, aunque, por fortuna, la cosa no fue a más.
Al árbitro, Pérez Lima, le dijeron absolutamente de todo y sólo reflejó en el acta unos pocos insultos. Incluso, el utillero del Betis le volvió a insultar a la cara cuando el acta ya estaba redactada, pero responsables del Espanyol le invitaron a irse para evitar males mayores. Sin duda, la imagen que dejaron en Montjuïc deja mucho que desear.
http://www.sport.es/default.asp?idpublicacio_PK=44&idioma=CAS&idnoticia_PK=399368&idseccio_PK=804&h=
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Luego se quejó del comportamiento de Valverde al festejar el gol del empate. No te jode, todo el partido dando por culo, pues normal...